¿Qué es la conversión a gas vehicular?
La conversión a gas vehicular es el proceso mediante el cual se modifica un vehículo para que pueda funcionar con gas como combustible alternativo, además de la gasolina.
¿Cómo funciona la conversión a gas vehicular?
Cuando conviertes un carro de gasolina a gas, se instala un sistema adicional en el vehículo que permite que el motor use gas como combustible. Este sistema trabaja junto con el motor de gasolina existente. Aquí te mostramos cómo es el proceso:
1. Instalación del depósito de gas: Primero, se coloca un depósito de gas en el automóvil. Este depósito normalmente se instala en el espacio donde estaba la llanta de repuesto, así que no afecta el uso del espacio en la cabina.
2. Sistema de tuberías: Se instalan tuberías que conectan el depósito de gas con el motor del carro. Estas tuberías llevan el gas desde el depósito hasta el motor.
3. Equipo de control: Se añaden válvulas y una boquilla de llenado. Las válvulas ayudan a controlar el flujo de gas, y la boquilla de llenado permite que puedas llenar el depósito de gas en una estación de servicio.
4. Adaptación del motor: Finalmente, se realiza una adaptación en el motor para que pueda usar tanto gasolina como gas. El vehículo puede alternar entre los dos combustibles según lo necesite.
¿Qué vehículos se pueden convertir a gas?
La mayoría de los autos de gasolina pueden ser convertidos a gas, pero hay algunas cosas que considerar. La conversión es posible para vehículos con:
- Motores de gasolina
- Carburadores
- Inyección de combustible
- Inyección multipunto
Los sistemas de gas disponibles son:
- GLP de 5ta Generación: Ideal para autos de 1995 en adelante.
- GLP de 6ta Generación: Para autos con inyección directa, aunque no todos los talleres lo ofrecen.
- GLP de 3ra Generación: Para autos anteriores a 1995.
Requisitos para convertir un carro de gasolina a gas
Para realizar la conversión, tu auto debe cumplir con las regulaciones del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).
Ventajas:
- Ahorro de dinero: El gas suele ser más barato que la gasolina, por lo que podrías reducir significativamente tus gastos en combustible.
- Menor impacto ambiental: El gas produce menos emisiones contaminantes en comparación con la gasolina, lo que ayuda a reducir la contaminación del aire.
- Mayor seguridad: El gas es más ligero que la gasolina, por lo que en caso de una fuga, se disipa rápidamente y presenta menos riesgos.
Puntos que deberías considerar:
- Costos iniciales: Convertir tu carro a gas puede tener un costo inicial alto, pero los ahorros en combustible pueden compensar esta inversión a lo largo del tiempo.
- Espacio en la cajuela: El depósito de gas ocupa espacio en la cajuela, así que puede reducir el espacio disponible para equipaje.
- Disponibilidad de gas: No todas las estaciones de servicio ofrecen gas, así que necesitarás asegurarte de que haya estaciones cerca de ti.
Convertir tu vehículo a gas te brinda muchas ventajas, pero una buena protección es clave para aprovecharlas al máximo. Por eso, asegura tu auto durante todo el año con nuestro Seguro Vehicular RIMAC.
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